Estamos viviendo una revolución
15 de Abril de 2025

Muchas veces me pregunto cómo habrán vivido las personas la Revolución Francesa, o cómo debe haber sido cuando la electricidad empezó a transformar hogares, alumbrando calles y ciudades enteras. ¿Serían aquellas personas conscientes de los profundos cambios que estaban experimentando, o simplemente vivían sus días con normalidad, sin darse cuenta de las consecuencias que esos sucesos tendrían para la historia y para sus propias vidas?
Algo parecido está ocurriendo hoy. Apenas somos conscientes de ello, pero en este preciso instante vivimos inmersos en una transformación radical, quizás mayor que cualquiera anterior. Una revolución silenciosa, completa y profunda que está modificando nuestro mundo más de lo que podemos imaginar.
Lo que hace única esta revolución
Esta revolución posee múltiples frentes. El primero que probablemente todos estamos notando ya es el laboral, que va a afectar de manera muy sustancial a nuestra autoestima. Para muchos de nosotros, sentirnos útiles haciendo nuestra actividad diaria, y pensando que aportamos mucho valor añadido al mundo, es fundamental en nuestra arquitectura psicológica.
La inteligencia artificial está transformando a velocidades vertiginosas nuestros trabajos, y también abriéndonos a novedosas posibilidades pero desde luego a la vez, creando una gran incertidumbre acerca del futuro. Profesiones y actividades que parecían estables o indispensables ayer, hoy ya están siendo redefinidas o directamente reemplazadas por nuevas herramientas tecnológicas. Es una revolución que está cambiando nuestra manera de ganar la vida y hasta nuestro propósito existencial.
Además, el mapa geopolítico del mundo está cambiando de una manera acelerada y compleja. Las alianzas, relaciones entre países y equilibrios globales están redefiniéndose día a día. En Europa disponíamos también de una autoestima colectiva alta (nos creíamos el centro del mundo) y ahora las élites nos están dando grandes lecciones de humildad.
Pero quizá la característica más trascendental de esta revolución sea la manera en que estamos empezando a comprender y percibir la realidad del mundo que nos rodea. Vivimos en tiempos en los cuales tenemos un acceso sin precedentes a la información, lo que nos brinda también un acceso, antes impensable, a muchísima más “verdad” de cada temática. Las contradicciones que siempre arrastramos como sociedad se están haciendo más visibles que nunca. En esta transparencia radical que estamos viviendo, resulta imposible sostener por mucho tiempo posturas contradictorias o falsas. Todo queda expuesto.
Cambios profundos: memoria, inteligencia y consciencia
La revolución también afecta profundamente a nuestros esquemas tradicionales sobre la memoria y la inteligencia. Hasta ahora, considerábamos que recordar datos y cifras o demostrar una alta destreza lógica era básicamente el parámetro fundamental de inteligencia humana. Sin embargo, la aparición de la inteligencia artificial nos lleva a reinterpretar qué significa ser inteligente, pero sobre todo, que es ser creativo. Estamos obligados a reforzar y valorar nuevas virtudes profundamente humanas, como la creatividad, la intuición, la empatía y la sabiduría consciente.
Algo similar a lo que sucede con esta revolución que vivimos, sucede también con muerte: una realidad que seguimos mantenido apartada, ignorada o inconscientemente negada. Hoy más que nunca necesitamos establecer una relación consciente con la muerte, integrarla vitalmente como parte natural del ciclo de nuestra existencia y aprender de ella. Vivir conscientemente, aceptando y asumiendo los ciclos completos de nuestra vida, será clave en esta nueva época.
La apuesta por la consciencia plena
Precisamente aquí reside nuestro reto más grande: esta revolución no es solo técnica, política o social, sino fundamentalmente una revolución de la consciencia humana. Nuestro compromiso debe ser aprovechar estos movimientos históricos para elevar nuestro nivel de consciencia y nuestros principios humanistas, al máximo.
El cambio vendrá, estemos preparados o no. Sin embargo, podemos afrontarlo desde una posición consciente, donde lo humano prime y establezcamos lazos auténticos entre nosotros. Donde seamos verdaderamente conscientes del mundo que nos rodea y actuemos en consecuencia, decididos a construir juntos un futuro mejor y más genuino.
En Televisión Consciente, ya somos más de 600.000 personas en todos nuestros canales, compartimos esta misma sensibilidad y esta búsqueda común. Somos individuos con distintas historias, edades y procedencias, pero nos une algo poderoso más allá del idioma común: la determinación por hallar la verdad en la existencia humana y vivir de forma coherente con esa búsqueda.
Un desafío vital y una invitación a despertar
Los tiempos revolucionarios como el que hoy vivimos sacan lo mejor y lo peor de la humanidad. Por eso, nuestra tarea es clara: necesitamos esforzarnos para ofrecer la mejor versión de nosotros mismos; siendo generosos, abiertos y dispuestos a aprender profundamente unos de otros. Estamos ante un cambio imparable que pide autenticidad, desapego de viejas creencias limitantes y apertura a nuevas formas de ver el mundo.
Existen en este camino muchas energías oscuras y fuerzas contrapuestas que buscan acomodarse en medio de los cambios. No siempre serán constructivas ni benevolentes. Precisamente por eso, la tarea del autoconocimiento y el crecimiento consciente resultan absolutamente imperativos.
Aquellos que no estén dispuestos al desapego, que se aferren a las ideas caducas, patrones insanos o negaciones personales, probablemente enfrentarán mayores dificultades, desilusiones y sufrimientos. Seguir anclados en paradigmas anteriores e ignorar el llamado a una transformación consciente podrá hacernos más daño en estos momentos históricos que nunca antes.
Nuestro compromiso contigo
Esta revolución, sin embargo, nos afecta a todos. Nadie está fuera. Todos la estamos viviendo en tiempo real. Desde Televisión Consciente queremos ser compañeros en este camino de transformación, si nos lo permites. Nuestra misión es clara: acompañarte, compartir contigo nuevas perspectivas y herramientas que te capaciten para vivir esta revolución desde una posición de consciencia verdadera, ayudándote a tener claridad, coraje y serenidad para enfrentar el reto.
En definitiva, somos parte de este histórico despertar que redefine nuestro mundo. ¿Seremos conscientes y protagonistas activos, o nos mantendremos inconscientes a los cambios que nos ocurren?
Estamos en una revolución profunda; prepárate para acompañarnos hacia el interior de la consciencia. Welcome a este viaje de transformación.